Desde que nacemos buscamos un vínculo de apego. No sólo es importante en la infancia, el apego es fundamental en la vida adulta para desarrollar nuestras emociones. John Bowlby, psicólogo y psicoanalista, fue el precursor de la teoría del apego hablando de él como las conductas tónico-posturales que acercan al niño al adulto. Vamos a hacer un repaso por el concepto de “vínculo del apego”: ¿cómo se construye? y ¿cómo influye en el desarrollo personal?.
El vínculo del apego
Son las relaciones que el bebé establece con las personas que le rodean. Desde que es consciente del embarazo, la madre establece ese vínculo de apego con su hijo. La confianza y seguridad que deposita el bebé en la madre, padre, educadores…va a determinar ese vínculo de apego.
La capacidad para establecer un vínculo aparece muy pronto en el bebé. El olor maternal es uno de los que desencadena reacciones de bienestar. Todas aquellas personas que interactúan con el bebé habitualmente y le dan respuesta a sus necesidades, fomentan el vínculo del apego. Las maneras de sujetar, sostener, mirar y abrazar al niño son reconocidas por éste como modos de seguridad y confianza.
Construyendo el vínculo del apego
En el periodo de constitución del vínculo del apego intervienen muchas sensaciones: el tacto, el contacto suave, el olor de la piel, el calor, la mirada, la sonrisa y la voz, entre otros. El contacto que los bebés establecen con el adulto es trascendental, el niño se relaja y su presencia lo tranquiliza disminuyendo la ansiedad y su actividad.
Los niños nacen en una situación de indefensión sin poder satisfacer sus necesidades biológicas y afectivas. A través del apego neutraliza los sentimientos de ansiedad y podrá conectar con el medio que le rodea. La interacción y la maduración del sistema nervioso permiten al bebe transformar sus conductas de apego en dos procesos:
- Progresiva internacionalización de las figuras primarias del apego. Pasa por varias fases.
- Desplazamiento del vínculo del apego a otros adultos y otras figuras.
¿Qué es el objeto transicional?
Cuando los niños se separan de la figura del apego primaria necesitan algo que les haga sentirse cerca. El objeto transicional es el que reemplaza a esa figura de apego. Por ejemplo: cuando los niños llegan a la escuela infantil, les cuesta separarse de los padres o la persona que les acompaña. En sucesivos días el niño lleva a la escuela su peluche, su almohada…,esos objetos que le hacen sentirse acompañado y le dan seguridad cumplen la función del apego. Es el niño el que elige un objeto. Hay niños que no lo quieren o no los necesitan.
Síndrome de Hospitalismo
La figura de apego es necesaria para el desarrollo del niño. Aquellos niños que se ven privados muy pronto de las figuras de apego tienden al aislamiento y la desconexión. Así surge el “Síndrome del Hospitalismo”. La separación se produce en tres fases:
- Fase de protesta: el niño expresa su inquietud y está en alerta constante de la aparición de su figura de apego.
- Fase de desesperación: el niño pierde las esperanzas de recuperar esa figura de apego y el llanto se vuelve intenso. Deja de moverse y no plantea exigencias.
- Tercera etapa: el niño mejora y comienza a conectar con los juegos y los cuidados pero la socialización es más superficial. Hay ocasiones en que no se da esta etapa.
Los comportamientos de apego son imprescindibles en la puesta en marcha de conductas exploratorias. La carencia del apego provoca perturbaciones en la motricidad.
El sentimiento de confianza y seguridad con el que el niño abordará el conocimiento dependerá de la calidad del vínculo del apego por parte de los padres y educadores.
Comportamientos como la succión del pulgar representan la búsqueda de contacto ante la ausencia materna. Por tanto, según Hanson y Berkson son comportamientos de apego.
Sin llegar a tener síndrome de hospitalismo, muchos niños tienen algunas de estas dificultades por el hecho de sentirse abandonados por sus figuras de apego.
La sobreprotección
Cuando el apego se convierte en dependencia pasa a ser sobreprotección. Esta conducta por parte de los padres anula la exploración de los niños y la conquista de su autonomía. El adulto se convierte en el protagonista sustituyendo la acción del niño y solo actúa por intermediación del adulto que lo acaba relegando al rol pasivo. El desarrollo estará influido por las decisiones que tomen las figuras de apego sobre lo que se debe o no se debe hacer, con lo cual el niño entrega su identidad y su seguridad en manos de dichas figuras. Será un adulto que busque otras personas de quien depender.
El niño sobreprotegido carece de la seguridad y confianza suficientes para enfrentarse a las dificultades del día a día y para ser el motor de su propio desarrollo.
2 comentarios en «¿Qué es el vinculo del apego?»
Me ha encantado vuestro post sobre el apego y sobre todo la sobreprotección. Que dificil es hacérselo ver a las familias que equivocan un apego seguro con no dejar ser a sus pequeños/as. Un tema delicado.
Gracias.
Así es Mar, muchas gracias por tu aportación. Un saludo